Poemas de: Nélida Beatriz Marteletti (Francis). Page: 5
Naci un 2 de enero en Nueva Galia-un pueblito de la provincia de San Luis-Argentina, a los 2 años viajamos con mis Padres, Antolín y Francisca, y mis hermanos hacia Buenos Aires, desde ahí vivo acá, en mi San Francisco Solano, en Buenos Aires.
Mi infancia fue muy feliz junto a mis padres y hermanos, soy una persona sencilla, humilde y muy solitaria, escribo desde los 13 años, mi primera poesía fue para mi madre, a la cual solo la tuve 15 años [...]
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Nélida Beatriz Marteletti.
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Nélida Beatriz Marteletti.
El abrazo
Al abrazarme, le pones alas a mis pies, me subes al cielo, me proteges, me das aire.
Tu abrazo es mi existir, solo espero; espero tu llegar. Tu abrazo fuerte, el que me hace impune, me cura, me sana, me da paz. Solo espero, espero, espero tu llegar.
Tu abrazo fuerte que me da paz, me eleva al cielo, me levanta como si fuera una pluma, y yo el ave, que la hecho andar.
Sí, tú, eres mi oxígeno, mi luz, mi vida, mi amor, mi mirar. Ven y abrázame fuerte, no me quites eso, no me lo quites, no me lo quites, no me quites, mi oxígeno, mi vida, mi luz, mi respirar.
Esa rosa roja
Amor, mira esa rosa roja tan bella, tan perfecta
con esas gotas de roció cayendo por sus pétalos.
Pareciera que está llorando, pero no, una rosa no llora,
es solo agua, gotas de agua que van cayendo.
Mira amor, que bella es, solo que sus gotas de roció,
la hacen aun más bella, tan roja, tan perfecta,
como, nuestro amor, como mi corazón.
Mira amor, la cortaré y te la regalaré,
para que cuando ya no esté, la mires y recuerdes.
La rosa soy yo, lo rojo es la sangre de mi corazón
que se alteraba por ti, y las gotas de roció,
fueron las lágrimas que mis ojos derramaron por ti.
Amor, cuando ya no esté acaricia la rosa, besa sus
pétalos y seca su roció, así estarás acariciando mi
rostro, besando mis ojos, y secando mis lágrimas.
Las que durante nuestro gran amor derramé por ti.
Espejos
Me miro al espejo, y ahí surge toda la imagen, del pasado triste y solitario, al mirarme siento que esa que está ahí, no soy yo, tan triste, tan sola y melancólica. En esa imagen comienzan a surgir las arrugas, las canas, y las heridas que hay en el corazón, en el cuerpo, y en el alma. No me gustan los espejos traen los malos reflejos, las malas heridas, los malos recuerdos. Los espejos son la clara imagen y reflejos del alma.
Esperanzas
Esperanzas, solo quiero tener esperanzas, fe y valor. Esperanzas quiero, para poder seguir viviendo y creer que nuestro amor es verdadero, que se puede salir de este pozo donde he caído y cada vez se hace más interminable.
Fe, para creer y pensar que se puede amar y ser amado sin vergüenzas, ni celos, sin envidias, ni odios. Y valor, para demostrarle a este mundo, que el amor existe, que es real, que se puede amar de verdad, sin malicias. Qué bello es amar, que para amar no hay impedimentos, ni raza, ni edad, ni clase social. Que para amar solo se necesita amor, mucho amor.
Solo quiero tener esperanzas, fe y mucho valor para amar y ser amada, que no haya engaños, y celos, solo amor, amor del bueno. Solo la esperanza de amor, salvará a este mundo de la incertidumbre, del vacío, y el infierno.
Este verso hoy es para ti
¿Qué estarás haciendo mi amor? Yo… escribiendo hoy, ya, versos para ti ¿En quién estarás pensando? ¿Quién besará tus labios en la mañana?
Son solo preguntas que me hago yo, cuando despierto y toco mi cama, y tu lado está vacío y helado. Sola, yo aquí en mi cama.
Sola, yo estoy hoy, aquí mirando por la ventana, y preguntándome: con quién estarás ahora, a quien le darás tu rosa, tu café por las mañanas.
Sola, estoy aquí, en esta cama helada, mirando sintiendo frío, sin saber qué hacer. Cómo dejar de pensar en ti, si solo pudiera un instante, si sólo pudiera poner mi mente en blanco y que tu rostro no se apareciera frente a mí en la ventana.
Como quisiera, sólo por un instante, dejar de pensar en ti, pero ya solo me queda esperar. Esperar verte venir hacia mí, con esa rosa roja en tu mano y tu café en la mañana.
Poesía de Nélida Beatriz Marteletti (Francis), Page: 5
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Nélida Beatriz Marteletti